Yo sé que algunos dicen que nació la tristeza
en las rosas de sangre que murieron de sed
porque habiendo tanta agua, Madre Naturaleza
no se acercó hasta ellas a darles de beber.
Yo sé que algunos dicen que ha nacido en la sala
de un hospital de niños, porque piensan que Dios
no pudo darse cuenta de cómo es fría y mala,
para un niño, la ley maldita del dolor.
Yo sé que algunos dicen que nació en esos seres
que ni creer pudieron ni pudieron amar...
Porque dudando huyeron a todos los placeres
de vivir y no osaron entregarse jamás.
Yo sé que algunos dicen que nació en la mirada
tan mansa y apacible del penitente buey
porque hay en su cabeza de bruto, esclavizada,
una torpe inconsciencia de todo su poder.
Yo sé que algunos dicen que ha nacido de la bruma
tonalidad del día que nos deja y se va...
Que la creó la noche con su manto de luna
blanco como una novia muerta sobre el altar.
Pero yo pensaría que nació la tristeza
después de aquel momento en que algo se logró.
Cuando el triunfo de haber gustado la proeza
no permite aún crear otra nueva ilusión...
No hay comentarios:
Publicar un comentario